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Productos |
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| Pvc | ||
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La producción y tratamiento de PVC no significa un daño para el medio ambiente. El elemento base, la sal, está disponible de forma ilimitada. El petróleo, que sin embargo es una materia prima limitada, para la fabricación de PVC se requiere exclusivamente un 43%, mientras que la mayoría de los otros productos sintéticos son 100% derivados de productos del petróleo. Al analizar el consumo de petróleo en Europa, se constata que los materiales de PVC consumen solamente el 4% del total. Un balance ecológico favorable La investigación científica internacional presenta los perfiles de PVC como una alternativa ecológicamente responsable para la fabricación de carpintería de exteriores. Una ventana en PVC tiene una duración de dos a tres veces superior a una ventana de aluminio o de madera. Y los de una ventana de madera son casi un 50% superiores a los de una ventana en PVC. Junto a estos bajos costes de energía, el PVC puede ser completamente reciclado y utilizado en una segunda fase de existencia. Un balance ecológico es la suma de todos los elementos que recargan y liberan el medio ambiente. En base a la energía consumida y la contaminación provocada, o por el contrario, la energía ahorrada o contaminación evitada, se dice que el balance ecológico es favorable o desfavorable. De esta manera para una ventana de madera, se debe talar, transportar, cortar, cepillar y pegar madera, y una vez colocada, debe ser regularmente tratada y pintada a fin de evitar el pudrimiento y mantener el aspecto estético. Todo esto son tratamientos que exigen energía y que de una u otra forma recargan el medio ambiente. Tomando en consideración todos estos factores, se puede decir que el PVC tiene un balance ecológico positivo. Respetuoso con la naturaleza
Bancos y mesas fabricados con material de PVC reciclado.
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